Con el proyecto de los estudios Universal de resucitar a sus monstruos clásicos (Drácula, la Momia, Frankenstein, etc.) la idea del remake en el cine adquiere vida propia y pasa a ser prácticamente un género en sí mismo. Si lo planteamos así, los cinéfilos deben superar la simple alusión a la "falta de ideas de Hollywood" y determinar la calidad de los remakes en función de su aportación a la historia original en que se basan.
Siguiendo el criterio de la aportación que estas películas realizan a la historia original en que se basan, hemos elegido unas cuantas películas que son ejemplo de lo que no debe ser un remake.
1.- Robocop (2014)
La película original de 1987 ya tuvo que sufrir dos secuelas porque el cine es un negocio y a los hijos de los productores no los alimentan los lobos. La historia del policía cyborg más famoso de Detroit fue rehecha en 2014. Si en la versión de los ochenta nos quejábamos de que los malos nunca le apuntaban a la cara, ahora tenemos a unos malos que nunca le apuntan ni a la cara ni a la mano derecha porque esta vez los científicos ridículos de Omnicorp se la dejan de carne y hueso.
2.- Desafío Total (2012)
Resulta llamativo que de la versión de 2012 se dijera que fue una adaptación del cuento "Podemos recordarlo por usted" de Philp K. Dick, ignorando el clásico de 1990 dirigido por Paul Verhoeven. Este es un ejemplo de manual de cómo el progreso en efectos especiales no mejora sustancialmente una historia.
3.- Psicosis (2010)
Pasando por alto que la obra clásica de 1960 de Alfred Hitchock tuvo tres secuelas y dos spin-off, Gus Van Sant decidió en 1998 hacer un remake del original. Se pasó de frenada pues esta nueva película más que un remake fue una copia plano a plano de la cinta original. No te canses Gus Van Sant.
4.- Invasión (2007)
Habiendo "La invasión de los ladrones de cuerpos" (1956), "La invasión de los ultracuerpos" (1978), "Body Snatchers" (o "Secuestradores de cuerpos", 1983) y esta "Invasión" de 2007 protagonizada por Nicole Kidman uno se pregunta si Hollywood nos quiere decir algo. Cada década que pasa el mensaje original de la novela corta de Jack Finney escrita en 1955 donde denunciaba el "terror rojo" del macartismo se va difuminando. Nos descartamos un crossover de La invasión de los ultracuerpos y la Bella Durmiente.
5.- Karate Kid (2010)
Will Smith tiene que meter a su hijo con calzador en el mundo del cine y nadie discute con Will Smith. El remake de 2010 de la historia original de 1984 nos presenta a a un señor Miyagui interpretado por Jackie Chan y a un Karate Kid prescindible. La cinta original pasó a formar parte de la cultura popular ("poner cera, quitar cera") y de la nueva nadie se acuerda.
En fin, no se trata de condenar al género del remake. Hay revisitas a historias conocidas que son una oportunidad para explorar y ampliar aquellos mundos imaginados, como es el caso de "Mad Max: Furia en la carretera". Sin embargo conviene recordar la Ley de Sturgeon que dice que el 99% de cualquier cosa es una basura. Con los remakes estaríamos en el 99,9%.
